1.Llena la olla quemada con agua, cubriendo todo el fondo.
2.Añade vinagre y enciende el fuego para que comience a hervir.
3.Cuando el agua y el vinagre hiervan, retira la olla del fuego.
4.Además, para limpiar las ollas quemadas por dentro cuando hay mucha parte quemada y pegada, necesitas agregar bicarbonato de sodio.
5.Verás que hay una reacción y que salen burbujas. Es normal y ya puedes lavar el recipiente frotando el interior con esta mezcla de agua, vinagre y bicarbonato y un estropajo o esponja. Utiliza un estropajo si la olla no tiene un recubrimiento antiadherente, pero si dispone de él, entonces usa una esponja suave para no estropearlo.
6.En caso de que algunas manchas permanezcan, aplica una pasta hecha con bicarbonato y unas gotas de vinagre diluido en agua, es decir, prepara la misma mezcla de antes pero mucho más espesa (más bicarbonato que líquidos). Deja que actúe unos segundos y luego pasa el estropajo, cepillo o esponja para frotar la pasta por la zona quemada y eliminar todos los restos tras enjuagar la olla con agua limpia